martes, 15 de septiembre de 2015

Buscar lo maravilloso para no acostumbrarse a las crisis: Erika Mergruen

  • La poeta y narradora afirma que al igual que en su novela “Todos los Vientos” vivimos una doble realidad donde lo cotidiano es lo vital y la verdadera sustancia de la vida se vuelve invisible



Pachuca de Soto, Hgo. a 15 de septiembre de 2015.- En la Feria Universitaria del Libro, que del 21 al 30 de agosto organizaron la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, su Patronato y el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), Erika Mergruen, autora de títulos como Marverde, El osario y El sueño de las larvas, entre otros, presentó su novela “Todos los vientos” editada por Cal y Arena.

En el auditorio Nicolás García de San Vicente del polideportivo Carlos Martínez Balmori, en la Ciudad del Conocimiento de la UAEH, la también columnista de La Jornada Aguascalientes, destacó que en lo insignificante reside lo asombroso y ante la situación tan violenta por la que atraviesa la humanidad es necesario recuperar el asombro para no acostumbrarse a tan difícil escenario.

“Hoy más que nunca existe esa necesidad de ver el mundo desde otra óptica y buscar la maravilla, porque eso es lo que puede ayudarnos a salir de tan tremendo agujero en el que todos estamos y del que todos somos responsables”, detalló.

Añadió que su novela es una propuesta para adoptar una mirada fresca de lo irreal y lo real: “es un reto personal ya que logré crear un umbral donde uno puede pararse y contemplar, por un lado lo real y por el otro lo irreal, y que se entrecruce lo fantástico con el mundo que nosotros decimos que es verdadero. Es una novela que tiene todas las gamas, todos los colores, muchos personajes, y creo que cualquiera puede encontrarse en ella, su reflejo, su eco y su voz”, expresó la autora.

Mergruen explicó que esta novela tiene un corte fantástico, sin embargo, ofrece al lector diferentes gamas de la literatura, donde el tiempo y el espacio se desarrollan de forma dinámica para abordar temas como la infancia, la adolescencia y la imaginación.

“No es una novela cien por ciento fantástica que resume de alguna manera lo que he escrito en 15 años. ‘Todos los vientos’ es un punto de vista ante la vida, no estoy casada con un solo género, he saltado por todos buscando mi propia voz y disfrutando incluir en ella cuentos, mini ficción, narración, novela, etc.”

“En la novela hay arquetipos de los cuentos infantiles, uno de los cuentos que uso aquí es uno que me contaba mi abuela, el cuento del chilar y lo que hice fue tratar de escribirlo lo más apegado al original para que no se perdiera”.

En este contexto celebró el que en nuestro país se esté apostando a la lectura ya que dijo, “en México si hay lectores, si se lee. En la calle uno observa y la gente está leyendo, así sea una revista, un libro de formación o literatura, no importa pero la gente lee. El mundo de lectores existe, es pequeño pero va creciendo. Hoy hay una nueva de comunicar la palabra escrita”, resaltó al reconocer que los medios electrónicos proporcionan una opción más a los jóvenes.

La obra de Erika Mergruen relata en sus 270 páginas que en "Umbrías", una ciudad habitada por asombrosos personajes, caen las cabezas de los gobernantes sobre los pisos del Palacio Municipal y los perros muertos son una valiosa propiedad. En la plaza de ‘Todos los vientos’ se erige una estatua de sal de la cual nadie tiene idea de su origen y alrededor de ella, los habitantes se preparan para los festejos de iniciación donde todos los niños son enterrados bajo el chilar, en el cementerio de los vivos, para que duerman y regresen del sueño de la vida. Luisa, personaje principal, es una joven que anhela huir de la ciudad, motivada por una postal y que antes de lograrlo, vive mágicas aventuras.


“Es una novela entretenida que puede leerse en distintos niveles porque la hice como lectora, pensando en lo que el lector quisiera encontrar en ella. Es una forma de darse cuenta de lo que me gusta y lo que he admirado en otros escritores. En ella plasmé lo aprendido de otros autores”, finalizó la escritora, quién espera algún día ser comparada con el novelista y narrador cubano Alejo Carpentier, reconocido como uno de los influyentes en la literatura Latinoamericana durante el realismo mágico.