Palacio Legislativo.
Expertos coincidieron en que el
mayor desafío del Poder Legislativo en 2021, es lograr instrumentos que
relancen la economía y atiendan la seguridad, la educación y la pandemia por
Covid-19.
Durante el debate virtual
“Análisis de los desafíos para el Poder Legislativo en 2021”, en el programa
“Parlamento en Vivo”, organizado por la Coordinación de Comunicación Social de
la Cámara de Diputados, en el tema de la reelección consideraron que es una
forma de profesionalizar el trabajo legislativo y confiaron en que dicho
ejercicio beneficiará a la población.
Pablo Javier Becerra, profesor e
investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), afirmó que el
mayor desafío va a ser que mediante el trabajo legislativo, lograr todos los
instrumentos que tengan que ver con la política económica para que pueda
desarrollarse, efectivamente, una estrategia de relanzamiento de la economía y
de enfrentamiento del Covid-19.
Comentó que el tema de la
pandemia, hasta el momento, no ha sido bien dimensionado por el Gobierno
Federal. “Tenemos una población de más de 120 millones de habitantes, dicen los
expertos que con un 70% u 80 % que se vacune se puede lograr la inmunidad del
rebaño, pero es una apuesta riesgosa, ya que los países deben hacer la apuesta
de vacunar a todos, el problema es que cuesta mucho”.
“La gente abarrota las estaciones
del metro Pantitlán y Toreo, porque tiene que ir a trabajar, entonces el
problema central está en varios aspectos que no han sido cubiertos, como, por ejemplo,
que la tasa de crecimiento pueda regresar a lo que tuvimos hasta 2018, hay que
recordar que en 2019 fue tasa cero, estancamiento, habrá que ver cómo el
gobierno logra empujar” la situación, cuestionó.
En el tema de la seguridad,
Javier Becerra dijo que es uno de los más sensibles, los feminicidios y
asesinatos han ido al alza, ante ello lamentó “los espectáculos que en varias
partes del país se realizan en contra de la Guarda Nacional”.
Sobre la reelección de los
legisladores, consideró que es una forma de mejorar su desempeño, porque “al
buscarla, los legisladores deben esforzarse por hacer mejor su trabajo, ya que
se enfrentarán a la posibilidad de ser reelectos después de tres años de
trabajo y los senadores después de seis años”.
Manuel González Oropeza, profesor
de la facultad de derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM),
celebró la reelección de diputados, pues “será una etapa excepcional e
histórica que vamos a vivir con el Congreso en materia de compromiso, ya que el
electorado al momento de sufragar va a pedir cuentas de sus propias políticas y
leyes”.
“Hay que considerar que el
Congreso mexicano tiene una gran ventaja al contar con 628 integrantes para
atender a 120 millones de habitantes en México, en comparación con el congreso
de Estados Unidos”, dijo.
González Oropeza consideró que
uno de los retos del Congreso a partir del año entrante en materia de salud,
economía y educación será “corregir esos pequeños errores, lagunas o suplir
vacíos que en la ley en general se han observado, tomando en consideración que
los congresos resolvían las dudas que presentaba la aplicación de la
legislación como: modificar, interpretar o derogar disposiciones en la ley,
basados en los defectos de la implementación”.
“Esto es importante porque se da
una colaboración muy estrecha entre el Ejecutivo y el Congreso. El Ejecutivo
implementa las leyes tal como están, cuáles son los defectos que una ley pueda
tener y en consecuencia lo plantea para subsanar esos errores. Por su parte, el
Congreso puede tomar nota y verificar, para subsanar esas deficiencias”,
añadió.
César Astudillo, articulista de
los diarios “El Universal” y “El Economista”, comentó que en materia de
seguridad se están discutiendo propuestas de reformas legislativas que son muy
relevantes, en particular la que está orientada a fortalecer las capacidades a
la Unidad de Inteligencia Financiera, la cual en este gobierno está siendo
fundamentalmente una gran fiscalía anticorrupción del país.
“Me parece que el Congreso de la
Unión tiene las posibilidades de fortalecer a la UIF, que ha demostrado
sobradamente que con los pocos instrumentos legales e institucionales que tiene
a su favor ha hecho una labor como pocas veces la hemos visto contra la
corrupción, y ha demostrado que hay deficiencias en el diseño normativo”,
precisó.
Consideró que está en manos del
legislador el revisar integralmente desde el diseño institucional, la
naturaleza jurídica y los alcances del funcionamiento de la UIF en temas
importantes.
En el tema educativo, dijo que la
Ley General de Educación Superior es fundamental, porque busca regular a todas
las universidades, hay que ser cuidadosos con la autonomía de las
instituciones.
“Me parece que si la óptica de
este gobierno es que las universidades cada vez hagan un esfuerzo de abrir más
espacios educativos eso tiene que venir acompañado de apoyos suficientes, sigan
perfilando carreras orientadas a las necesidades presentes y futuras del país y
de un fortalecimiento en su autonomía presupuestal”, añadió.
Dijo que, en el tema educativo,
todavía queda la Ley de General de Ciencia, Tecnología e Información,
“esperemos también que haya un parlamento abierto en la materia, es decir hay
que apostarle a la ciencia y el congreso tiene la responsabilidad de ver la
forma cómo se discuta este tema porque haya que apostarle a la ciencia,
tecnología e innovación”.
“Lo que le corresponde al
legislador es darse cuenta de que nuestro ordenamiento jurídico no estaba
preparado para una pandemia de esta magnitud, ni en los órganos que prevén, ni
en la forma que tienen que reaccionar ni en el mecanismo interno frente a la
pandemia”, señaló.
Por ejemplo, dijo, “pondría sobre
la mesa la necesidad de repensar si el Consejo de Salubridad, que se debe de
activar en este momento, está conformado de la manera que debería estarlo para
afrontar una pandemia de estas características, esto es una discusión que debe
llevar tiempo y convocar a todos los sectores para analizarlo”.
En el tema económico, comentó que
se debe reorientar los esfuerzos presupuestales, al menos en los años
venideros.
El articulista externó su opinión
positiva sobre la reelección “por lo que puede significar para fortalecer el
trabajo parlamentario, establecer las bases de un sistema representativo más
robusto, y en este sentido ésta va a ser una prueba de fuego para ver cómo
funciona”.
“Lo que me preocupa es que no
hayamos tenido la posibilidad de sentar reglas claras para la reelección”,
expresó.
Consideró que se debe hacer un
análisis posterior para evaluar a “quienes sí se reeligieron y vamos a ver si
realmente se profesionalizó la carrera legislativa a partir de la forma de cómo
evaluemos su desempeño, pero inicialmente tengo una opinión positiva”.
Por último, mencionó que el mayor
reto del Poder Legislativo es que el parlamento siga activo y desempañando su
función constitucional.