viernes, 12 de octubre de 2012

Proponen incluir “valores universales” en tercero constitucional para recuperar armonía social

Iniciativa ciudadana promovida por la Fundación Educación por la Experiencia, que encabeza Armando Prida Huerta, que trabaja los valores en Puebla


México, D. F., a 11 de octubre de 2012.- Con la firme intención de encontrar un equilibrio que permita recuperar los niveles de convivencia pacífica y armonía social, la senadora Lorena Cuéllar Cisneros presentó hoy una iniciativa ciudadana nacida en Puebla, que adiciona al artículo Tercero Constitucional para incluir los "valores universales" en la educación.

La propuesta avalada por todo el Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (PRD), surgió de la Fundación Educación por la Experiencia (Exe), presidida por el empresario Armando Prida Huerta, quien destacó que su futura aprobación "cambiará a México".

Al integrar las palabras “valores universales” en el Artículo 3º, Párrafo Segundo de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, quedaría como sigue: “La educación que imparta el Estado tenderá a desarrollar armónicamente, todas las facultades del ser humano y fomentará en él, a la vez, el amor a la Patria, el respeto a los derechos humanos, los valores universales y la conciencia de la solidaridad internacional, en la independencia y en la justicia”.

“Todos los días nos damos cuenta que el comportamiento individual y colectivo de nuestra gente refleja una trágica ausencia de valores”, expresó la senadora por Tlaxcala Lorena Cuéllar Cisneros, al exponer los motivos de la iniciativa, quien agregó que “hemos descuidado la educación de nuestros niños y jóvenes, que son la base de la esperanza para alejarnos de esta realidad que estamos padeciendo, llena de violencia, de crimen organizado, de drogadicción y de corrupción”.

Agregó que “es verdad que existen vínculos indisolubles entre las condiciones económicas que padece nuestro país y los efectos sociales negativos que estamos sufriendo, pero también es cierto, que el deterioro en nuestra calidad de vida, se debe al descuido enorme que hay en la formación de valores de nuestra gente desde una temprana edad”.

Para la senadora Cuéllar, es necesario que desde las escuelas, de manera organizada y urgente se fortalezcan y se amplíen las enseñanzas sobre valores sustanciales y universales, como lo son, entre otros el respeto a la legalidad, el rechazo a la violencia, el comportamiento honesto, la protección y mejoramiento del medio ambiente, la convicción de erradicar la corrupción y la impunidad como una forma vida en nuestra sociedad, la participación democrática (para que se comprenda que ésta no se agota con la sola acción de votar), la tolerancia hacia quien piensa diferente, la eliminación de conductas discriminatorias de cualquier tipo y, la solidaridad con los que menos tienen.

Tras la presentación de la iniciativa, Armando Prida Huerta destacó que la adición de los “valores universales” a la educación en general es “el principio del cambio en México, para educar sustentado en valores”

El presidente de la Fundación Educación por la Experiencia afirmó que este programa ya se aplica en Puebla con excelentes resultados y la organización lo estará llevando muy pronto a otros estados de la república.

De la misma forma, añadió que fortalecer este método, una vez aprobada la iniciativa de reforma al Artículo Tercer Constitucional, “en leyes secundarias deberá aprobarse un presupuesto específico para la educación en valores con libros de texto que den el programa necesario de trabajo para que llegue a los padres de familia, a los alumnos y a los maestros”.

Para llevarlo a cabo en todo el país deberán invertirse “2 mil 500 millones de pesos anuales aproximadamente, considerando que por cada peso que se invierta en la educación, por lo menos van a regresar un mínimo de cien pesos”, y se podrá recuperar la armonía social tras “cambiar la violencia, la corrupción y la impunidad, entre otros, por paz, tranquilidad y alegría de convivir todos juntos”.

Al realizar la lectura en tribuna, Cuéllar Cisneros destacó que se entiende por Valores Universales al conjunto de normas de convivencia válidas en un tiempo y época determinada en un número de 12, enlistadas de la siguiente forma:

1. Amor: es el sentimiento que experimenta una persona hacia la otra para desearle todo lo mejor.
2. Cooperación: es la participación de dos o más personas para alcanzar el éxito.
3. Libertad: es la capacidad de tomar decisiones y responder por sus acciones.
4. Felicidad: es la máxima aspiración de la humanidad.
5. Paz: es la fuerza que transforma a la humanidad.
6. Humildad: la humildad no permite que menospreciemos a ninguna persona y nos da la capacidad de tener desprendimiento en nuestro trato para con los demás.
7. Honestidad: permite que seamos sinceros y nos ayuda a tener una conducta integra con nosotros mismos y hacia las otras personas.
8. Respeto: permite que conozcamos el valor que tiene nuestra propia persona y nos ayuda a honrar el de los demás.
9. Responsabilidad: capacidad de asumir tareas y compromisos.
10. Sencillez: naturalidad y espontaneidad en la acción.
11. Tolerancia: permite que respetemos las ideas de los demás, aceptando sus diferencias para tener buenas relaciones humanas.
12. Unidad: es la capacidad de poder estar con otros y compartir causas comunes para llegar el éxito. Visión compartida y sentido de pertenencia.

miércoles, 10 de octubre de 2012

Columna


Reflexiones
Por Francisco Alfaro Ramírez

LIBERTAD PRENSADA

Siendo México un país con grandes peligros para la prensa, hace que la libertad de expresión se vea acotada por los intereses políticos y los intereses de los grupos delictivos. Existen antecedentes donde la mordaza institucional ha hecho de la libre expresión un lujo, en los días posteriores al 2 de octubre del 68, la prensa tímidamente manejo los actos criminales del gobierno, como confrontaciones sin importancia.

Hoy tenemos una mayor afluencia de datos, imágenes, pero en su saturación y constantes actos de violencia, quedan en el olvido, los comunicadores caídos en el cumplimiento de su, ya no deber, sino como un compromiso de oficio, de aptitud y actitud personal, de dar información real, verdadera y sin censura a la población.

Con un sinfín de crímenes en México, pocos de los que se refieren a los comunicadores, se han resuelto, así desaparecidos, nos recuerdan que aún hay mucho que hacer, que el Estado tiene una factura con el pueblo, y esto es el resolver los crímenes que se realizan en contra de sus comunicadores y comunicadoras, sus obreros, sus pocos policías honestos, sus bomberos sus obreras de la frontera, sus estudiantes, hombres y mujeres que pretenden tener una vida mejor.

De manera descarada hoy nos dice el presidente que está muy orgulloso de haber enfrentado al crimen, paro él no lo enfrento de manera inteligente y lo que provoco es una oleada de muerte, así que quienes enfrentaron a los criminales fueron algunos policías y algunos servidores públicos, el presidente solo los hecho al ruedos en contra de un toro cebado a servidores públicos que no saben a que enfrentan, si al propio gobierno o a criminales independientes.

Los criminales que han gobernado siguen libres, no hubo justicia para los asesinados por el ejército en la plaza de las tres culturas en Tlatelolco, para los estudiantes asesinados en el halcónazo de 71, no hay justicia para los asesinados en aguas blancas en 1995, de Acteal Chiapas en 1997, de los muertos de la normal de Ayotzinapa.

Es pues necesario aplicar la justicia, pues observar una y otra vez asesinatos, donde los criminales son personas públicas, ex gobernantes que gozan de impune protección por parte de gobiernos, por parte de políticos que han apostado a que el pueblo olvida, y que el crimen en un país donde la democracia carece de valor y donde el valor económico es lo que prevalece y genera la más alta corrupción en el gobierno.

Es claro que no se ha hecho nada por terminar con las bandas criminales, pues si empiezan desde al propio gobierno, no se podrá terminar con el otro crimen organizado, que pareciera que solo si es afectado alguno de sus miembros, como los diputados, hijos de ex gobernadores o algún otro pariente, entonces si se mueven todos los medios necesarios para castigar al culpable, pero si es secuestrado, asesinado, o intimidado algún ciudadano común, algún estudiante, alguna mujer, o algún periodista, comunicador o reportero, no hay poder que mueva un dedo, ni policías, ni investigaciones, así podemos ver que solo merecen ser investigados los crímenes que se cometen contra un grupo de corruptos gobernantes, a todos los demás nos puede llevar el tren.

Con esto nos podemos preguntar: ¿Hasta cuando se hará justicia en México?

Por supuesto tú tienes la mejor opinión y la mejor acción.

lunes, 8 de octubre de 2012

Columna



RECURSOS PÚBLICOS, ABUSO DE PODER Y MUERTE

México, D. F. (3 de octubre de 2012).- Un análisis del Centro de Investigación en Economía y Negocios del Tec de Monterrey presentado la semana pasada, nos informa que más de 25 mil servidores públicos en el país perciben más de 1 millón de pesos al año. De ellos, 250 se llevan a sus bolsillos entre 3 y 3.5 millones de pesos anualmente; mil funcionarios ganan entre 2.5 y 3 millones; 2 mil burócratas de primer nivel perciben entre 2 y 2.5 millones; 7 mil 250 obtienen una remuneración de entre 1.5 y 2 millones de pesos anuales y los restantes 14 mil 500 tienen salarios de entre 1 y 1.5 millones de pesos.

La semana pasada, también, de acuerdo con una nota del diario La Jornada, una niña murió y siete menores indígenas fueron trasladados a hospitales con graves afectaciones propiciadas por una aguda desnutrición. La niña tenía cinco años de edad, cuatro son bebés, menores de un año, y tres más tienen entre uno y cuatro años. Están graves.

Desde noviembre de 2011 se alertó de la situación alimentaria sufrida por los pobladores de la zona y a principios de 2012 hubo alarma por la grave sequía sobre las grandes extensiones de la Sierra de Chihuahua donde habita la comunidad rarámuri. Se realizó una campaña nacional y diversos sectores de la sociedad, desde los medios de comunicación, figuras del espectáculo y gobiernos decidieron ayudar.

Sin embargo, llegaron las elecciones y todo mundo se olvidó de los más de 75 mil rarámuris que habitan en los municipios de Guachochi, Urique, Bocoyna, Guerrero, Guadalupe y Calvo, Uruachi, Balleza, Carichí, Chínipas, Guazapares y Temósachic. Por el contrario, entre los partidos políticos y el Instituto Federal Electoral se gastaron más de 10 mil 200 millones de pesos del presupuesto federal, además del dinero operado fuera de los márgenes oficiales, que seguramente fue una cantidad superior.

10 mil 200 millones de pesos equivalen, por ejemplo, a pagar un salario mínimo general por un año a casi 450 mil trabajadores o comprar 20 mil 400 casas o departamentos de interés social.

El dispendio del sector oficial, de acuerdo con las cifras dadas a conocer por el Tec de Monterrey es en ocasiones hasta vulgar. “La percepción de ingresos es contrastante: 6.7 millones de personas cuando mucho ganan un salario mínimo en tanto que en el sector público los gastos en servicios personales van al alza”, apunta el análisis.

Para los estudiosos de la casa de estudios “si se llevara a cabo una disminución de tan solo el 10% del presupuesto destinado a las remuneraciones de los funcionarios que ganan cuando menos un millón de pesos, alcanzaría a pagar alrededor de 178 mil salarios mínimos (3,948 millones de pesos aproximadamente)”.

El abuso de poder observado en el manejo de los recursos públicos no es de hoy. Es una práctica observada durante muchos años por quienes llegan a ocupar cargos públicos de relevancia, aunque quienes van como segundos o terceros de abordo se despachan con singular alegría y prácticamente nunca se conoce de ellos.

Es urgente que exista también un tabulador en salarios mínimos para los funcionarios de todas las dependencias de gobierno federales, estatales y municipales. Ahí están los cálculos del Tec de Monterrey. Deben entender que ser servidores públicos no es sinónimo de riqueza inmediata y que, por el contrario, hacerlo debe convertirse en un motivo de orgullo y satisfacción, porque de otra forma, continuarán las rencillas y peleas entre la llamada clase política para alcanzar el poder y hacerse millonarios de la noche a la mañana.

De esta forma, a gente como los rarámuris, pero también a las etnias de Guerrero, Oaxaca, Chiapas y Veracruz, por decir de algunas, se les podría dotar de mayores oportunidades —que no darles dinero— para que puedan aspirar a una vida mejor.