jueves, 20 de mayo de 2021
Sin corrupción y opacidad, el cambio en el deporte de Metepec está en curso: Gaby Gamboa
Metepec, Estado de México.
Porque el deporte es una de las bases para tener una
juventud emocionalmente sana, físicamente fuerte y disciplinada, Gaby Gamboa
Sánchez advierte que será un puntal de su próxima administración, una vez que
combatió la corrupción y opacidad dejada por gobiernos anteriores y logró
incrementar los recursos para el Instituto Municipal de Cultura Física y
Deporte de Metepec, de 300 mil a 1.4 millones de pesos, con lo que el cambio
está en curso.
La candidata de la alianza “Juntos hacemos historia” a la
presidencia municipal de Metepec por un segundo periodo, observó en su
recorrido de hoy por la Unidad Deportiva Lázaro Cárdenas que cuando llegó a
administrar el municipio, encontró que eran sistemáticos los actos de
corrupción de servidores públicos, coludidos con los dirigentes de ligas
deportivas y que, así como tampoco había registro de los beneficiarios, ni de
las actividades, mucho menos de cómo se gastaban los recursos.
Los espacios deportivos estaban abandonados, muchos de ellos
en manos de privados que usaban los recursos del municipio, lucraban y no los
rehabilitan. Sin embargo, desde que llegó, se lograron recuperar varias canchas
públicas y unidades deportivas, a cuyos usuarios se les dio certeza jurídica en
las Unidades Deportivas de Hortaliza, San Gabriel, San Bartolomé y Lázaro
Cárdenas, mientras que las de La Pila y Tizatlali hoy se encuentran recuperadas
y en proceso de mantenimiento.
Es decir, observó Gaby Gamboa, se generaban recursos, pero
no le llegaban al Instituto Municipal de Cultura Física y Deporte. “Recibimos
un Instituto con 306 mil pesos de ingresos anuales y en nuestro primer año lo
incrementamos a 1.4 millones”.
La abanderada de MORENA, PT y Nueva Alianza a la presidencia
municipal de Metepec expresó que gracias al esfuerzo que se realiza en todas
las áreas, hoy “somos el único Instituto del Deporte de todo el Estado que
tiene un área para darle opciones deportivas a personas en condiciones de
discapacidad; además, somos de los pocos institutos que hoy cuentan con área
médica y de fisiatría”.
Por esto mismo, expresó Gaby Gamboa a los vecinos:
“¿Recuerdan cómo hace tres años los espacios deportivos estaban abandonados?
Pues hoy no sólo rehabilitamos varios y vamos por más, sino que también creamos
el programa de estímulos deportivos que beneficia a muchos jóvenes de manera
universal, mientras que antes se entregaban las becas sólo por conveniencia
política, a los amigos de los funcionarios”.
Como verán, expresó la candidata morenista, “en cuanto a opciones deportivas para el bienestar de los metepequenses el cambio está en curso. Hemos logrado grandes cosas, pero necesitamos hacer más. Por eso, sigamos viendo al futuro luchando por este cambio verdadero. No regresemos al pasado de aquellos gobiernos que privilegiaron la corrupción en vez de crear oportunidades para nuestra juventud”.
Algo más que palabras
Custodiar la red de la vida
“Será vigoroso que
tomemos el raciocino de la naturaleza, en disposición siempre de respirar
liberación e inspirar sosiego”.
Estamos obligados a cuidar la red de la vida, a fomentar
espíritus autónomos en un ecosistema diverso, poblado de gentes singulares,
globalmente vitales y necesarias. Tanto es así, que ese manto natural de
recursos biológicos, forma parte de nuestra propia existencia; dándonos
aliento, ofreciéndonos refugio y energía en suma. En consecuencia, nos
concierne en unión avivar la protección del medio ambiente, pero también
respetar esa biodiversidad que es la que realmente nos da sanación, tanto en el
cuerpo como en el alma. No hay avance mientras sigamos destruyendo abecedarios
que nos alientan, manantiales de rocío que nos regeneran. Nada de este mundo
nos tiene que resultar indiferente. Naturalmente, necesitamos un ánimo más
conjunto y universal para poder reparar tanto abuso humano sobre el cauce
viviente. La irracionalidad del rebaño, no puede continuar rigiendo nuestros
destinos, rumbo al desconcierto total y
a la degradación ambiental. En cualquier caso, será vigoroso que tomemos el
raciocino de la naturaleza, en disposición siempre de respirar liberación e
inspirar sosiego.
Hemos de reconocer, sin embargo, que nos faltan espacios
verdes y nos sobran muros sin nervio. Perdido el corazón, la masa se deteriora,
hasta el extremo de inundarnos un gemido de dolor que nos deja sin ganas de
vivir. Por tanto, se vuelve indispensable generar otros entornos para la vida,
cuando menos más seguros, saludables y habitables. Ya está bien de
contaminarnos el celeste mar, con lenguajes que nos esclavizan, triturándonos
hasta la propia conciencia. Es hora de activar otros liderazgos capaces de marcar
otros caminos más justos y solidarios. Toca reorientar la dirección, bajarse de
los endiosados pedestales terrestres y ascender hacia otras visiones, más de
servicio y donación. Esto implica regresar a la sencillez, tener el valor de
fomentar el cambio de actitudes, pues cada día disminuye el número de especies
a un ritmo acelerado; y, uno por uno, formamos parte de esa solución, lo que
nos invita a mirar este mundo con ojos más sabios. No olvidemos jamás, que es
la vida la que nos dona vida. Dejemos a los deslenguados que digan lo que les
satisfaga, nosotros esforcémonos en desvivirnos por vivir en la decencia, que
nos hará más corazón que coraza.
La gravedad del momento es tan fuerte que necesita
traducirse en nuevas prácticas. Comencemos por desterrar de nosotros esta
inmoralidad que nos envuelve. Cuando el relativismo moral se vuelve dominante,
del principio al fin se relativiza y se abre la puerta a la opresión. Ya está
bien de no corregir los malos comportamientos. Para empezar, quizás tengamos
que aprender a no avasallar y a
dominarnos, a mostrar gratitud como expresión de reconocimiento y a pedir
clemencia cuando hacemos algún perjuicio. Son, precisamente, estos pequeños
gestos de coherente urbanidad los que nos ayudan a edificar una viviente
cultura de consideración a lo que nos rodea. Por ello, es hora de activar otros
modelos, mayormente de profunda conversión interior, si en verdad queremos
resolver los grandes males que hoy asolan al mundo. Quizás tengamos que
aprender a valorar las pequeñas cosas de cada día, sin apegarnos tanto al
poseer y al tener, sino más bien al donarse y a la mesura. Al fin y al cabo, lo
trascendente es no trastocar egoístamente los andares vivientes a causa del uso
alocado y del abuso irreflexivo.
Ante este desdichado panorama, nos alegramos que este año se
abra la puerta a dos nuevas décadas; la del periodo de la Ciencia de los
Océanos para el Desarrollo Sostenible y la etapa de la ONU para la Restauración
de los Ecosistemas. Todo ello, viene a ratificar, lo cardinal que es amparar el
tejido vivo, teniendo en cuenta que cada cual es responsable, en mayor o en
menor medida. Indudablemente, hemos llegado al momento crucial, donde se nos
exige que cada ser humano, por minúsculo que nos parezca, haya de reconsiderar
sus prioridades, sabiendo que salvaguardar hoy la inmunidad de nuestro planeta
es también proteger la salud y el
bienestar de las generaciones próximas. Mal que nos pese, esto nos enseña, que
tanto la recuperación de la COVID-19 como la reparación de nuestro orbe, han de
ser las dos tareas prioritarias que han de llevar en mente los caminantes del
mundo. Compromiso real, luego.
Víctor CORCOBA HERRERO / Escritor
Necesaria una movilidad sustentable e inclusiva en la era Post-Covid
Ciudad de México.
El mundo entero ha sufrido un impacto económico inédito
debido a la crisis sanitaria causada por el Coronavirus SARS-CoV-2, obligando a
un confinamiento social y creando un punto de inflexión en las dinámicas de movilidad
y demandas de viajes futuros.
Por ello, se requiere una movilidad limpia, saludable y
sustentable en la era post-covid, aseguraron expertos en transporte durante su
participación en el 12º Congreso Internacional del Transporte (CIT 12), que
organiza la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM).
En su oportunidad, el director General de Urbanismo y
Sistemas de Transporte (Ustran), Ángel Molinero, señaló que después de la
pandemia, deberá “existir un transporte público adecuado eficiente y accesible
a la economía de todas las personas en el que no haya distinciones para su
uso”.
Durante la mesa de diálogo: “Rediseño de la movilidad para
un nuevo futuro”, aseveró que tras el confinamiento, urge generar estrategias
para reducir los viajes de trabajo y a los centros educativos, pero sin llegar
a la “no movilidad”.
“El futuro lo tenemos encima y tenemos que reforzar el
transporte público para generar una movilidad activa que nos permita llegar a
una ciudad compacta, que podemos llamar la ciudad de los 15 minutos”, apuntó.
Destacó que el papel del gobierno será importante para la
recuperación del transporte público, quizá el más golpeado por el Covid-19, y
generar esquemas claros y confiables de financiamiento para ampliar el
servicio.
Julián Sastre González, director de la Consultora ALOMON y
Presidente del Instituto de Movilidad de España, dijo que el reto es apostar
por transporte colectivo y la electromovilidad, así como aumentar el uso de la
bicicleta pública, pues con ello se contribuirá a mejorar la movilidad en las
ciudades.
“La movilidad activa debe estar en la cúspide, porque son
además sostenibles y saludables, y es inteligente por su aplicación que la
convierte en un sistema revolucionario, porque los proyectos de movilidad deben
servir para crear ciudad”, apuntó.
Por su parte, Angélica Castro, directora internacional de Transconsult, destacó la importancia de reducir el uso de vehículos con bajas ocupaciones y fomentar la utilización de transporte público pues pese al confinamiento, se registró un incremento en los niveles de contaminación mundial.