¡ HORIZONTE INCIERTO !

Editorial Bamba Política

Por: Lorena Rocío Arvizu Rivera

Nos encontramos aún en el lapso donde los propósitos de año nuevo siguen vigentes, esa línea invisible que nos separa siempre entre el olvido y aquello prioritario para que este año suceda lo mejor, lo más valioso y por supuesto que sea menos errado. Los cúmulos de deseos permanecen en los propios pensamientos como pilares de nuestro personal y social paradigma.

Pero tan importante es el presente, como el futuro, y se recalca el pasado. “Aquel que no aprende del pasado está condenado a repetirlo”. Al parecer nuestra sociedad no tiene memoria, es como si dicha función del cerebro colectivo estuviese desconectada. ¿Qué pasó durante el año consumado? –Que debiera ser determinante de nuestras decisiones en este nuevo año-.

Tenemos sin dicha, la etiqueta de un año rojo que enlutó los hogares de muchas familias mexicanas, la violencia se extiende en el territorio nacional.

“Nuestra bandera fue teñida de un color sangriento, ante pasiones de un gobierno que nos pide lealtad, mientras ellos nos dan la espalda. Y por qué no, menoscaba los problemas urgentes de México al señalar inconveniencias en otros Estados, como lo dicho por el Secretario de Gobernación Blake Mora al manifestar que los estados que critican a México están peor, eso no justifica lo que padece nuestro país.

Así que, cuáles serán los colores que definirán a México este año y en este momento no nos referimos a ningún partido. Por el contrario las sociedades necesitan retomar los valores como la verdad, la lucha, el compromiso, la reconstrucción, el amor. Porque nos negamos a pesar de la tendencia inicial de este 2011, de teñir de rojo carmesí nuevamente nuestro territorio. Bien dice Rius ¡Basta de Sangre!

Celebremos hechos como la libertad de luchadores sociales como Ignacio del Valle, y a la par recordemos, también aquellos acontecimientos que siguen lacerando nuestra sociedad como el reciente asesinato de Susana Chávez activista que acuñó la frase “Ni una muerta más”, y ahora forma parte de esa lista de mujeres que claman justicia sin ser escuchadas, o el desprestigio mediante toda una campaña contra el periodista Ricardo Ravelo –por el solo dicho de un delincuente-, y compartir la tristeza por el reciente fallecimiento de Samuel Ruíz, el obispo de los indígenas de quien como dijo Granados Chapa no importa que nadie pida su canonización, el si vivió cada día de su vida de acuerdo a los preceptos del Dios en quien creía.

Por último ¿Tenemos el gobierno que merecemos? Creo que no, los mexicanos aún en nuestros defectos, somos gente que trabaja, que sueña, que vive con pasión. Pero al decir que cada cual tiene el gobierno que se merece, es como afirmar que dictaduras alrededor del mundo, -y genocidios entre las mismas- han estado frente a gente que merece que se le quite su dignidad, su vida.

La criminalización del periodismo se ha convertido en una manera de control, no olvidemos entonces que el periodismo sin verdad, se ostenta sin alma. Es el deber de todos nosotros que a través de imágenes y palabras demos espejo fiel de la realidad. Que todos los que de alguna manera ejercemos el maravilloso quehacer periodístico cerremos filas, y unamos nuestras voces apoyándonos unos a otros en la lucha por el derecho a informar.