El Padrino de Holgazanes
Resulta que Pablo González, director de la dirección de
desarrollo urbano, bien conocido en el
bajo mundo como “el padrote de los holgazanes” (abundante en nepotismo) continúa
enriqueciéndose a costillas del pueblo, apadrinando a sindicalizados del SUTEYM
de Valle de Chalco, así como también a familias enteras que laboran en su cuchitril
(oficina) e infinidad de obras y construcciones que van desde primer hasta
tercer nivel.
Pero aquí el asunto no termina, porque Pablo González es el vinculo de los 15-30, conocidos como aviadores
(que no trabajan, pero bien que les gusta cobrar su quincena reflejado como
pago a los favores políticos). Todo lo anterior, pareciere apuntar que es para
llenar su cochinito para la próxima campaña, y lanzarse como candidato a
rugidor, perdón regidor de este municipio, considerado por la ciudadanía
quejosa como el más saqueado por perredistas, priistas y panistas.
Otro caso similar, por mencionar, es el del flamante
subdirector de gobierno municipal de nombre José Enrique López Lima, que en
contubernio con la delegada municipal de nombre Guillermina Mendoza Medina de
la colonia Jardín de este municipio de Valle de Chalco, se dedican a intimidar
a humildes comerciantes que se encuentran ubicados cerca de dicha delegación,
donde en varias ocasiones han sido
intimidados y hostigados por estos par de holgazanes, los cuales usurpan
funciones que no les compete, ya que este asunto le concierne a la dirección de comercio.
Esperemos que las autoridades competentes
tomen cartas en el asunto.
Y qué decir, de las organizaciones “marca patito” que abundan
fuertemente en el Distrito Federal y en el Estado de México, entre otros
lugares; tales como: Confederaciones de Derechos Inhumanos que engañan a la
humilde ciudadanía con calcomanías de los susodichos, para circular sus
automóviles en días que no circulan. Ante tal engaño, se ven perjudicados
peceras, taxis, transportes de carga, y automovilistas particulares, que tienen
que pagar para afiliarse a estos patitos la cantidad de 400 pesos; en caso, de
querer placas para circular carros extranjeros “no legalizados” su costo será
de 3 mil 500 pesos. Entonces el dilema es que pasa con las placas del Distrito Federal
y de otros estados, significa que ya no sirven; o acaso será, que tiene mayor validez
las calcomanías y placas de estas susodichas organizaciones fantasma que por
supuesto no pagan impuestos, ya que ni siquiera a los afiliados les otorgan
recibos, ni facturas ante una situación
legal, comentaron quejosos defraudados.
Por último, y como lo hemos repetido en muchas ocasiones,
existen representantes de organizaciones y por supuesto servidores públicos que
siguen haciendo mal uso de su cargo, al solapar, representar y explotar al transporte
de taxis piratas no regularizados, bici taxistas, moto taxis, entre otros, invadiendo
calles y avenidas principales; ignorando a las autoridades del transporte para
que se regularicen y trabajen con documentos al día.
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