viernes, 20 de julio de 2012

Columna


Reflexiones
Por Francisco Alfaro Ramírez

INDEPENDENCIA ALIMENTARIA

México ha sido convertido en un país dependiente entre otras cosas del elemento más  esencial para la independencia de un país, y es precisamente la producción alimentaria.

El campo mexicano ha sido abandonado por los diversos gobiernos, sin sistemas modernos de producción, sin tecnología moderna, sin sistemas científicos avanzados, sin el apoyo real al campo, a los pescadores nacionales, a la distribución de los productos del campo, el resultado es que a pesar del territorio, de las riquezas, de la población trabajadora, ningún gobierno ha querido invertir en educación y generación de sistemas agrícolas, pesqueros y de producción industrial que garantice el progresivo desarrollo de México.

Evadiendo su responsabilidad para con la población y dedicándose al pillaje, el saqueo a fortalecer sus grupos políticos, los gobiernos han comprometido la independencia del país, aumentando la pobreza, la pobreza extrema, avocados en pugnas intestinas que nada benefician a la población ni a los propios gobiernos, se ha estado comprometiendo la independencia de la nación de manera paulatina y constante.

Las industrias extranjeras han estado produciendo productos transgénicos híbridos, en especial el maíz, el cual será sembrado en suelo nacional, esto solo será posible si los gobiernos lo permiten.

El riesgo es que el maíz híbrido no produce maíz fértil, esto evita la reproducción del maíz, quedando atada la producción a lo que se le quiera vender al productor, en cantidad y calidad. Esto es solo para empezar, así que si se mantiene el modelo de producción como está, estaremos condenados gracias a los gobiernos en convertirnos en consumidores dependientes, estaremos a merced del extranjero.

Sin la consolidación de la nación, sin la unidad nacional, sin gobiernos comprometidos con su población, seguiremos en la pobreza, en la dependencia, bajo las órdenes del extranjero, nosotros ponemos los muertos, ellos las armas.

Aquí quedan algunas preguntas: ¿El gobierno electo será capaz de revertir el proceso de entreguismo de los anteriores? ¿Se logrará abatir la pobreza e impulsar el desarrollo económico que beneficie a todos los mexicanos, o solo a unos cuantos oportunistas? ¿Se logrará la independencia alimentaria de México? ¿Podrá por fin haber un gobierno honesto en México?.
Por supuesto tú tienes la mejor opinión.