domingo, 13 de mayo de 2012

Pobre debate... Pobre México

Por: Renato Consuegra

Pobre debate... Pobre México… por los políticos que tiene.

México, D. F.- Ninguno de los presidenciables dijo cómo va a sacar a México de la crisis social en que se encuentra. Navegaron de muertito. Nadie generó compromisos serios, reales y convincentes, que realmente le cambien el rostro a nuestro país.

Sólo los vimos expresar refritos de lo que cada uno nos ha manifestado desde hace 38 días cuando iniciaron sus campañas, incluidos los ataques que no se habían lanzado entre ellos de manera directa, pero sí sus equipos de campaña y troles en las redes sociales.

A mí me hubiera gustado escuchar, por ejemplo, cómo van a devolvernos no sólo la confianza en la política como herramienta de diálogo y acuerdo social, sino la viabilidad que como país México tuvo en la década de los años 60.

Hacerlo implicaba proponer la forma cómo van a combatir dos de los tres principales males que tiene el país: corrupción e impunidad.

Cualquier programa de gobierno, por bueno que sea en el escritorio, se quiebra cuando se le lleva al terreno de la práctica y se topa con un sistema corrupto, donde las cosas no avanzan si cada uno de los eslabones pretende sacarle jugo económico.

¿Qué compromisos reales tienen para que no haya más gobernadores que hipotequen el futuro de la gente y de México, pero también, cómo van a castigar a quienes hoy sabemos, impunemente se convirtieron en nuevos multimillonarios?

Mientras no exista justicia y se atrape y castigue a estos depredadores de los impuestos de la Nación, la inseguridad será un cáncer que vamos a padecer porque la impunidad se cimenta en un sistema de colusión que penetra todas las estructuras y niveles.

Es una pirámide perversa de la que todos reciben, como cascada, los beneficios de su omisión. El cinismo los hermana. Sean Montiel, Moreira o Bejarano.

La Policía Nacional o Gendarmería Nacional serán entelequias mientras los principales males arriba citados no se resuelvan. Ayer dijeron qué, pero nunca el cómo.

¿Cómo van a evitar que los sindicatos como los de la educación, petroleros, ferrocarrileros, burócratas, electricistas, continúen como el pesado lastre que son para las finanzas del país y el sistema de pensiones, sino también, cómo hacerlos productivos para que verdaderamente aporten a la economía de la nación?

Hablaron de generación de empleos. Pero, cómo si las micro, pequeñas y medianas empresas que aportan más del 75 por ciento de los puestos de trabajo formales en el país padecen de grandes conflictos de supervivencia por las altas tasas impositivas y los compromisos de un sistema de seguridad social caduco.

Gracias a todas estas cargas, la gran mayoría de las nuevas empresas cumple su ciclo con una duración no mayor a 30 meses.

Hoy no hay empleos en el sector formal porque el informal los acapara. Ahí no se pagan impuestos, tampoco Seguro Social, Infonavit. Es más fácil acudir al tianguis que a los negocios establecidos.

Quadri el único más o menos salvable de los cuatro, hizo su trabajo. Nada tiene qué perder y sí mucho qué ganar para él, pero sobre todo para su patrocinadora, Elba Esther Gordillo, dueña del Panal. Lamentable que con este debate logre mantener el registro de ese partido.

Anoche los candidatos hicieron gala del otro gran mal que aqueja a nuestro país: la simulación y contribuyeron al circo. Nadie quiere entrarle a fondo a solucionar los reales problemas que tiene nuestro país.

E-mail: renatoconsuegra@yahoo.com.mx
Twitter: @renatoconsuegra
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(*) Esta columna fue publicada en los diarios El Economista, La Crónica, Rumbo de México y La Crisis entre 1997 y 2006. Hoy regresa en el portal La Otra Opinión de Ricardo Alemán (http://www.ricardoaleman.com.mx), inicialmente lunes y miércoles. Renato Consuegra es ganador del Premio Latinoamericano de Periodismo José Martí y director de Difunet y Campus México.