Exige Acción Nacional condiciones para la protección de periodistas en el proceso electoral

• Demanda el líder estatal que el ejercicio de la libertad de expresión no sea utilizada como medio de represión

Naucalpan de Juárez, México.- Octavio Germán Olivares, presidente del comité Directivo Estatal del Partido Acción Nacional se pronunció por que los partidos políticos en el territorio estatal garanticen el libre ejercicio del periodismo y del acceso a la información para evitar que los periodistas durante el proceso electoral para la renovación de la gubernatura del Estado, sean víctimas de actos arbitrarios, ajenos o no a su voluntad, cometidos por grupos o autoridades, sobre todo de seguridad pública.

Exigió también que el ejercicio del periodismo no sea utilizado por grupos de infiltración política, para reprimir el acceso a la difusión o para espiar y sabotear el libre desarrollo de las campañas electorales.

Octavio Germán recordó que periodistas son aquellos que están vinculados a un medio de comunicación mediante cualquier tipo de figura legal o que hacen su trabajo de forma independiente y que participan de manera directa recabando, redactando y difundiendo información de interés público.

El también diputado federal advirtió que la libertad de expresión y el acceso a la información no pueden ni deben estar al mejor postor de grupos políticos que no solo actúan de manera más agresiva para pretender controlar la agenda de los medios de comunicación, sino que además como las bandas del crimen organizado buscan manipular una cobertura mediática que convenga a intereses facciosos.

Recordó que en México la prensa trabaja en medio de agresiones físicas, de amenazas e intimidaciones y con presiones de coacción. Añadió que los partidos políticos deben ser los primeros garantes en vigilar y exigir que el ejercicio del periodismo responda a los más puros sentimientos del constituyente en la libertad de expresión.

Para concluir, Octavio Germán Olivares pidió a quienes practican el periodismo que también asuman sus obligaciones éticas y profesionales con el público y con la verdad, respecto a la calidad de cuanto escriben, e impedir que la libre expresión de las ideas sea utilizada facciosamente para beneficiar a ciertos grupos de poder, en detrimento de la democracia y de una verdadera competencia electoral, en igualdad de condiciones.